El Castro de Coaña y otros yacimientos visitables
Castro de San Isidro
El Castelón de Coaña es el más popular de cuantos castros se conocen en Asturias. Esta notoriedad se debe a lo temprano de su descubrimiento y a la gran extensión excavada a lo largo de casi doscientos años de intervenciones. Al igual que buena parte de los castros de la región, éste era conocido desde antiguo.
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Localización:
Bousoño-Brañavella, San MartÃn de Oscos-Pesoz
Itinerario de aproximación:
Carretera AS-12 (P.K. 52,700). Pista sin acondicionar (7 Km)
Opcional: acceso a pie desde los pueblos de Lixou / Lijou (Pesoz) y Bousoño (San MartÃn de Oscos)
Visita:
Libre
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El castro de San Isidro se localiza sobre la lÃnea de cumbres que señala la divisoria administrativa entre los municipios de Pesoz y San MartÃn de Oscos, a unos 600 m de altitud. No es ésta la única singularidad que ofrece pues posee un tipo de fortificación excepcional en nuestra región: las piedras hincadas, también denominadas Caballos de Frisia. A ellas hacen referencia algunas obras de finales del siglo XVIII en las que se menciona la existencia de "un antiguo fuerte defendido por piedras puntiagudas". Sin embargo, a pesar de su temprano conocimiento, el castro tan sólo fue excavado en años recientes y sobre áreas muy limitadas (1986 y 1987).
La ruinas se extiende sobre una superficie ligeramente inferior a 1 Ha, de la cual, buena parte está ocupada por las fortificaciones. El visitante podrá observar en su aproximación al cerro la sucesión de fosos que rodean el acceso al recinto. Sobre los parapetos intermedios se disponen las "piedras hincadas", sucesivas lÃneas de losas de pizarra verticales interpuestas, muy eficaces para dificultar el paso al enemigo. Tras ellos se alza una monumental muralla (1), de 3 metros de anchura, cuyo trazado permite realizar un recorrido completo al recinto. En las zonas excavadas puede observarse la profundidad original de los fosos y origen de los parapetos (2), el paseo de ronda interior de la muralla (3) o alguna de las construcciones descubiertas en el interior del recinto (4).
La fundación del castro parece estar relacionada con el establecimiento de unidades militares y el control de las minas de oro que Roma explotó durante los siglos I y II de la Era. A muy poca distancia, en el vecino pueblo de Arruñada (San MartÃn de Oscos) puede visitarse un magnÃfico conjunto minero en el que, además del monumental tajo abierto en la montaña, se conservan el depósito y canal de abastecimiento a la explotación.
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